TÉCNICAS COMUNES PARA LA
PREPARACIÓN DE ESQUELETOS.
Si
está interesado en montar el esqueleto en una base o una caja de exposición
cubierta de vidrio, la técnica es como sigue: a) Quite la carne y desarticule
como se indica más abajo, b) quite la grasa, c) Blanquee, d) Monte.
Cuando
se trabaja con peces grandes, corte a través de la piel y saque las vísceras.
Quite
la piel y músculos de los lados del cuerpo donde no haya estructuras
esqueléticas.
Una
cuestión muy importante, identifique primeramente la especie del ejemplar que
preparará. Con reptiles más grandes, aves y mamíferos, sobre todo éstos
últimos, tenga mucho cuidado en quitar el tejido muscular en el lugar de origen
e inserción, cuidando de no destruir los ligamentos que conectan los huesos. No
pierda de vista los pequeños huesecillos, como las rótulas de las extremidades
posteriores. Quite el cráneo cortando cuidadosamente los ligamentos entre este y
el atlas. Limpie el cerebro con una cuchara para cráneos o con una aguja
hipodérmica. Quite los ojos y pedazos grandes de músculos de mejilla, pero
cuide de no quitar las proyecciones óseas del cráneo. En especímenes más
grandes quite los órganos de la caja torácica y la carne de entre las costillas,
cuidando no cortar el cartílago que une a las costillas con el hueso del pecho.
Técnica de hervir y limpiar.
A
pesar de que muchos Mastozoólogos limpian los cráneos o esqueleto por éste método,
causa más daño a los huesos y conexiones ligamentosas que cualquier otra
técnica.
La
superficie de los huesos se hace porosa, las suturas tienden a aflojarse y los
dientes a caerse. Para usar ésta técnica, simplemente hierva los especimenes
hasta que la carne se afloje del hueso. Quite la carne, seque bien el esqueleto
y cúbralo con aerosol plástico claro para reducir la porosidad de la superficie
de los huesos.
Maceración en agua.
Si
se necesitan esqueletos no ligamentados, simplemente limpie el material
esquelético después de quitar la carne, en agua fría y déjalo a temperatura
ambiente durante 20 o más días, hasta que la carne esté bien podrida y separada
de los huesos. Tire los contenidos líquidos, cuidando no perder ninguno de los
pequeños huesos. Después de secar quite la grasa y blanquee. La técnica para
preparar esqueletos con ligamentos para montarlos después se menciona a
continuación, está tomado de Turtox Service Leaflet No. 9 1958.
“Ponga
los huesos en un recipiente de vidrio o porcelana de tamaño conveniente y cúbralos
con agua de la llave (nunca use ácidos o sustancias químicas de cualquier
tipo), no permita que entre ninguna sustancia extraña (metal, madera, etc.) al
recipiente, ya que esto decolora los huesos. El recipiente se debe mantener a
temperatura ambiente y el agua se debe cambiar diariamente, al principio se
notará mucha sangre en cada cambio, pero esto disminuirá mientras se vaya
desprendiendo los huesos de la carne. Durante este tiempo se está llevando a
cabo la acción bacteriana sobre la carne.
Cuando
el agua se ve clara, tirela y ponga los huesos en una solución de una onza de fosfato
de trisodio por cada galón de agua. Mezcle bien hasta que el trisodio se
disuelva, deje los huesos en esta solución durante 12 a 24 horas. Este baño
tiene un doble propósito, el de poner fin a la maceración y el de aflojar e
hinchar el tejido que queda en los huesos.
Para
limpiar saque los huesos de la solución de fosfato de trisodio y déjelos
escurrir.
Prepare
un cepillo de cerdas duras, agua caliente y cal clorinada, sumerja el cepillo
en agua caliente, después en la cal clorinada. Cepille los huesos con
movimientos cortos y rápidos. Esto provoca una acción que quema a los tejidos
adheridos a los huesos y causa su desaparición. (Por precaución se recomienda
el uso de guantes de plástico durante la operación)
Enjuague
con agua fría frecuentemente cepille hasta que haya quitado la carne pero no
los ligamentos que unen los huesos, finalmente enjuague con agua fría y seque a
temperatura ambiente.”
Métodos para remover grasa
No
es costumbre quitar la grasa a esqueletos y cráneos pequeños a menos que se piense
usarlo para exposición o estudio. En huesos más grandes se deberán hacer varios agujeros en el eje de la cabeza para permitir
que entre la solución desgrasadora. Se utiliza Tetracloruro de Carbono para
desgrasar, aunque la gasolina blanca representa un buen sustituto (más
recomendable). Los solventes son volátiles y por lo tanto el recipiente debe
tener una proporción de área de superficie muy pequeña, debe haber buena
ventilación y se deben usar guantes de hule, evitar aspirar y que se acumulen
gases, ya que estos son explosivos.
Los
especímenes deben permanecer en el recipiente entre unos días a unas semanas dependiendo
el tamaño y la cantidad de grasa que contenga, se elimina la grasa flotante frecuentemente.
Seque los huesos al aire.
Técnica para limpiar y blanquear
Los
especímenes esqueléticos que se han ensuciado por el uso continuo, deberán ser lavados
con agua tibia y detergente. Después de esto, enjuague con agua y seque. Si los
huesos siguen manchados, pueden ser blanqueados en una solución al 5% de
Tetracloruro de Carbono. Si es posible, sumerja los huesos en la solución. El
material recién limpiado, requerirá hasta 10 horas para quedar blanco. Enjuague
bien y seque los huesos.
Montaje de esqueletos
Si va a montar los
esqueletos es recomendable la técnica de maceración en agua, ya que los esqueletos desarticulados deben unirse
con pegamento o alambres y generalmente quedan más débiles. Los esqueletos
pequeños por lo general se montan en cajas con tapas de vidrio y los más
grandes en bases de madera. Es recomendable tenar siempre a la mano un esquema
del esqueleto del espécimen a montar, para no perderse con los huesos pequeños
Preparación y Montaje de Esqueletos
Ò Maceración: después de limpiar las vísceras y partes carnosas
procede a preparar el esqueleto limpiándolo en un recipientes por el que
circule el agua para que salgan las materias que se desprendan de los huesos.
Hay maceración en agua fría y maceración en agua tibia y caliente
Ò Blanqueamiento de huesos: para este proceso existen multitud de
procedimientos, el más fácil consiste en bañar la osamenta en agua oxigenada al
10%. Luego se someten a la acción del sol hasta que queden totalmente secos.
También se puede utilizar la opción de macerado y blanqueo conjunto, que se
componen de carbonato de sosa 125g, cal
viva 30g, agua en ebullición 2,5 l. No debes utilizar nunca para el blanqueado
compuestos de cloro pues dejarían los huesos porosos, tampoco se debe utilizar formol ya que este descalcifica con
el tiempo.
Ò Desengrasar : antiguamente muy usado, ahora es muy controversial, la grasa es parte
del hueso, el proceso se trata de abrir un hueco en el hueso y con la ayuda de
solventes, como el jabón en barra y/o gasolina se deja macerando. Estos métodos
sacan la grasa pero dejan el hueso sin información química, sin la grasa el
hueso se ve más bonito pero es más frágil, por lo que no se recomienda. Se
puede limpiar la superficie del hueso con alcohol al 96% cuando se necesite.
Ò Cráneos de Mamíferos: se corta detrás de los cóndilos occipitales, se
remueve cuanta carne y cerebro sea posible, con un cuchillo. Remoje en agua
durante una semana o hierva a fuego lento, se remueve la carne sobrante (hervir
puede quebrar dientes caninos y otros). También se puede enterrar el cráneo y
dejar que las hormigas y escarabajos terminen de limpiar. Una vez que este
limpio puede ser blanqueado al sol o con peróxido de hidrogeno al 3%(agua
oxigenada).
Ò Limpieza
Mientras más seco sea el proceso es mejor, se debe
hacer en un lapso muy corto de tiempo, con la menor cantidad de reactivos.
Asegúrese que es necesario el proceso de limpieza,
El agua al interactuar con las proteínas y minerales
del hueso le causa daño e inestabilidad a este, sin embargo hay huesos que tal
vez lo necesiten como los de exhibición.
Hay que tener en cuenta precauciones como, si se
utilizan soluciones acuosas no se deben dejar mojado los huesos, si se utilizan
enzimas se deben neutralizar después de reacción.